PREMIOS NACIONALES DE FOTOGRAFÍA.

 

        FOTÓGRAFOS.



        Cristina García Rodero es una fotógrafa española nacida en Ciudad Real, España, el 14 de octubre de 1949. Es popularmente conocida por haber sido la primer mujer española en ingresar en la prestigiosa academia de fotografía Magnum. Se licenció en Bellas Artes en la Universidad Complutense de Madrid. Fue en 1983 cuando comenzó a impartir clases de fotografía como docente hasta el año 2007. 

          Su trayectoria como fotógrafa no es del todo extensa; no obstante su habilidad con la cámara ha logrado posicionarla en lo alto de esta disciplina artística; pese a todas las dificultades que se le plantaron en la vida. En 1973 comenzó a plantearse la fotografía como algo más serio, después de haber participado en varios concursos universitarios. En los años siguientes, lograría compaginar su trabajo, también relacionado con la fotografía, hasta el día de hoy, donde es su profesión principal a la que dedica prácticamente todo su tiempo.     








            Isabel Muñoz es una prestigiosa fotógrafa española reconocida mundialmente por haber ganado el Premio Nacional de fotografía en 2016. Nació en 1951. En 1970 se trasladó a vivir a Madrid, y 9 años más tarde, decidió hacer de la fotografía su afición en profesión. para ello se matricula en Photocentro. El siguiente año, conocerá a las que se convertirían en sus dos figuras referentes en el mundo de la fotografía: Ramón Mourelle y Eduardo Momeñe. Los siguientes años, una vez tuvo su primer encargo, todo fue cuesta arriba para Isabel Muñoz.  En 1986 regresa a Madrid, de ahí en adelante, Isabel se dedicaría a viajar por el mundo para abrir nuevos horizontes en su trabajo. A partir de ese momento, Isabel creará numerosas colecciones inspiradas en sus viajes y en sus vivencias personales. Finalmente, se le otorgaría el Premio Nacional de Fotografía en 2016, lo que hizo que fuese aún más reconocida.



               





            Alberto García Alix es un fotógrafo español nacido en 1956 en León, España. Es conocido por la serie de fotos que hizo durante "La Movida" de Madrid, y por su estilo característico a la hora de retratar fotografías; donde tiene a presentar cuerpos desnudos, actos sexuales, gran cantidad de droga, y un gran abanico de elementos que resumen a la perfección tal suceso histórico en nuestro país como lo fue "La Movida."

            Tiene afán por realizar retratos, por lo general de personas de su círculo cercano. Sus fotos destacan por no tener ningún tipo de pudor y por ser directamente violentas y cargadas de una representativa fuerza explosiva. Trabaja principalmente en blanco y negro. 

            Como novedad en su trayectoria profesional, ha decidido trabajar el vídeo estos últimos años, siendo una novedad para él. Es mundialmente reconocido por haber representado a la perfección lo que fue la movida madrileña. Recibió por ello el Premio Nacional de Fotografía en 1999.









        LECTURA DE IMÁGENES.






    Esta fotografía fue realizada por la artista española Cristina García Rodero. Se trata de una foto horizontal en blanco y negro. La angulación es normal y se trata de un plano entero. La línea de horizonte está levemente torcida.

    En el centro de la composición hay una niña de aproximadamente siete años de edad. Tiene el pelo corto y levante ondulado, por encima de las orejas. Parece llevar una diadema o cinta de pelo de color negro. Está de puntillas, con sus brazos alzados de manera que quedan horizontales al suelo. Su brazo izquierdo está levemente doblado, simulando hacer un gesto. Su postura corporal nos da a entender que está imitando a una bailarina de ballet. Lleva puesto un vestido con tres botones bajo el cuello, es de color oscuro y le llega por encima de las rodillas. Por debajo de este vestido, lleva un polo de manga largas con lineas horizontales. En las piernas, viste unas medias ajustadas color claro. Por último, lleva unas botas finas color oscuro.

    A su derecha, es decir, a la izquierda de la fotografía, hay dos niños. Son más bajitos que el personaje principal de la foto, a quien están mirando directamente. El primero de los infantes, el más cercano a la niña, lleva un polo metido en los pantalones y unas zapatillas deportivas, todo ello de color oscuro. Es el más bajito de la pareja. El otro lleva una chaqueta con cremallera y unos pantalones, ambos de color claro. Lleva también unos zapatos de color oscuro. Ambos estás apoyados en la pared.

        La pared está gravemente deteriorada, por lo que se deduce que la foto fue tomada en un país de bajos recursos; si además tenemos en cuenta los ropajes y aspecto general de los infantes que aparecen en la foto. Esta pared, además de estar repleta de piques y desgastes, tiene una pizarra rectangular, no muy grande, en el centro de la pared; un poco más arriba incluso. El suelo también parece estar algo deteriorado, y se puede apreciar el polvo que cubre los tablones de madera que componen el suelo. 

    
        Analizando esta fotografía desde un punto de vista más subjetivo, podemos extraer numerosas conclusiones que den sentido a esta obra. Por la posición del cuerpo de la niña, como se ha mencionado anteriormente, se intuye que pretende imitar a una supuesta bailarina de ballet. Su rostro está tranquilo, de hecho, sus ojos se encuentran cerrando, permitiéndonos pensar que está imaginándose a sí misma en otro lugar, quizás en un escenario, cumpliendo su sueño de ser bailarina y huir de un país empobrecido. También podemos interpretar que está trabajando en su afición ya que un supuesto profesor escribió en ese pizarrón de la pared, es decir, esas cuentas matemáticas que podemos apreciar si observamos con detalle. Los dos niños que la observan, lo hacen con una sonrisa burlesca en su cara, probablemente porque se están riendo de su compañera de clase, quien en vez de comportarse de manera poco llamativa, está bailando en el centro de la clase. Aparentan ser la clásica figura de bromista en una clase, por eso están haciendo burla a la chica. Este es el típico escenario que se da en cualquier clase en la actualidad, un grupo riéndose de alguien que actúa diferente a los demás. En este caso, esta discriminación se acentúa todavía más al tratarse de una niña el sujeto distinto, teniendo en cuenta además que se desarrolla la historia en un país subdesarrollado. Creo que esta foto trata de difundir el mensaje de que no debemos dejar que la opinión de los demás nos aleje de perseguir nuestros sueños. A pesar de nuestras condiciones, debemos mantener la esperanza de que vamos a poder lograrlos con persistencia.












            Esta fotografía fue realizada por la artista española Isabel Muñoz. Se trata de una foto horizontal, a color, con una angulación normal y siendo un plano entero.

        El fondo de la foto es completamente negro. En el centro de la foto hay una mujer que se encuentra colgando de una cuerda que rodea y presiona todo su cuerpo, causando que tenga los brazos anudados detrás de la espalda y su pierna derecha doblada, mientras que su otra pierna esta elevada por otras cuerdas. Es una mujer joven, delgada, con rasgos asiáticos, que se encuentra desnuda. Lleva unos zapatos de tela y un manto colorido en que cuelga desde su espalda. Su rostro nos permite intuir que está dormida, o incluso muerta.

        Desde el punto de vista subjetivo, he identificado esta foto con el concepto de libertad, quizá incluso con la discriminación racial que sufren las personas asiáticas día a día. A lo largo de la historia, las personas asiáticas han sufrido una fuerte discriminación por sus rasgos físicos, cultura, idioma... Las cuerdas simbolizan la presión social que sufren y como los fuerzan hasta su máximo. También se puede interpretar que, al tratarse de una mujer desnuda que está dispuesta como si se tratase de un "producto" la autora busca representar la sexualización de la mujer y como en la actualidad se presenta el cuerpo femenino como si se tratase de un objeto. Hay múltiples factores que dan lugar a diversas interpretaciones de esta fotografía, y eso es lo esencial de la obra.










            Esta fotografía fue realizada por el fotógrafo español Alberto García Alix. Es una foto cuadrada en blanco y negro. La angulación es normal y se trata de un plano entero. 

            En esta fotografía se nos presenta una mujer tumbada en una cama como principal foco de atención de la composición. Es una mujer de pelo moreno y de complexión delgada. Está tumbada, completamente desnuda, con la espalda arqueada. Se está tapando la boca con el brazo, el cuál tiene doblado y erguido. Está encima de una colcha que aparenta ser bastante blandita, y en la cabeza de la cama hay una almohada cuadrada de color oscuro en la que se está apoyando. Tiene un tatuaje en el hombro, pero apenas se puede apreciar.

        Analizando la obra de una forma más subjetiva, he considerado que se trata de una fotografía que ha sido tomada antes (o después) de un encuentro sexual entre la modelo y el fotógrafo. Me parece más razonable que haya sido realizada después ya que la cama está algo desecha, la mujer está despeinada y, como es obvio, está completamente desnuda. No se trata de un pose desnudo en un estudio; esta foto respira comodidad y confianza. Es evidente que la relación entre modelo y artista es cercana, más allá de que hayan mantenido relaciones sexuales o no. Si la chica estuviese incómoda, trataría de tapar su cuerpo, sin embargo, su lenguaje corporal nos permite deducir que no le da ningún tipo de reparo estar completamente desnuda frente al fotógrafo en un ambiente íntimo que podría ser la casa del fotógrafo perfectamente.


        




Comentarios