CINDY SHERMAN.

     



Cinthia Morris Sherman, mundialmente conocida como Cindy Sherman, es una artista reconocida internacionalmente por sus brillantes fotografías. Nació el 19 de enero de 1954 en Nueva Jersey, Estados Unidos; concretamente en el municipio de Glen Ridge. Se crió junto a su madre, su padre, y sus cuatro hermanos, siendo ella la menor de los cinco. Desde pequeña se mostró fuertemente interesada en la fotografía, y es que, con tan solo 7 años Cindy ya tenía un pequeño cuaderno donde coleccionaba todas las fotografías familiares que tenía. En ellas, buscaba su figura y se rodeaba a ella misma, remarcando debajo de cada foto que esa era ella ("That's me!"). Podemos decir que fue en ese momento cuando nació su pasión por autorretratarse. Le ensimismaba observar las fotografías en las que aparecía y admirar como a pesar del paso del tiempo seguía viéndose a ella misma en las fotos. 


Más que el propio arte en sí, su mayor influencia fue sin duda el cine. Gracias a la inspiración que adquirió de esta rama artística pudo crear increíbles personajes que protagonizasen sus autorretratos. De hecho, ella misma afirma que aquellos autorretratos sutiles en los que puede distinguirse la figura de Cindy Sherman no le gustan para nada. A pesar de ser ella siempre quien esté detrás de los personajes de sus fotografías, no le gusta ser reconocida. Su objetivo es crear personajes; personajes que cuenten una historia única. Además, ella busca despegarse completamente de esos personajes, llegando al punto de tratarlos desde una 3ª persona como si se tratase de alguien completamente desconocido y no fuese realmente Cindy bajo un disfraz. 


El trabajo que Cindy Sherman hace es verdaderamente admirable. Desde siempre quiso alejarse del arte clasista y crear algo innovador que rompiese con la teoría del arte tradicional; quería crear algo que revolucionase a las masas y rompiese con todos los esquemas creados anteriormente. Puede llegar a parecer irónico teniendo en cuenta la chocante fama que ha ganado esta fotógrafa en las últimas décadas, pero lo cierto es que en un inicio, ella llegó a pensar que la fotografía era algo temporal y que jamás podría convertirse en algo que le diese de comer toda la vida. Resulta que se equivocaba. 


A lo largo de su carrera ha hecho numerosas series de fotografías, todas ellas realmente interesantes.

SERIES.

Untitled (1975-1976)

La primera colección de Cindy nace a raíz de su interés por registrar su progreso de transformación en diversos personajes. Para este proyecto, Sherman se centra en la experiencia y deja de lado sus conocimientos académicos; esto creó un punto de partida que le daría prestigio en el ámbito artístico años más tarde. La publicación de esta serie supondría un punto de inflexión en la historia de la fotografía pues se considera un trabajo completamente innovador, 

 


Untitled Film Stills (1977-1980)

Uno de sus proyectos más exitosos, Untitled Film Stills es una serie cuya finalidad es representar estereotipos típicos del cine estadounidense de los años 70. En esta ocasión, Cindy, aficionada del cine de Hollywood, quiso que las fotografías de esta colección pareciesen escenas de películas. Por eso mismo cada foto parece sacada de un fotograma de una película de cine de clase B. Este trabajo oculta detrás de cada foto una historia completamente intrigada que permite que todo aquel que la vea formule una historia para cada una. 





- Fotografía de moda (1983-)

Para cuando Sherman hizo esta serie ya había ganado cierto prestigio y fama y su nombre no era para nada desconocido. Dianne Benson, dueña de varias boutiques en Estados Unidos le comisionó en 1983 una serie de fotografías para la revista Interview. En ellas, Cindy explorará la noción de la belleza más allá de lo que solemos ver en fotografías convencionales.




- Fairy Tales (1985-1986)

Esta serie resulta muy similar a Untitled Film Stills sólo que es muy distinta estéticamente. Hizo este trabajo para revisar la iconografía de los cuentos infantiles. Los personajes de esta colección son característicos por alejarse de la idea tradicional de personajes de cuento y retratar personajes perturbadores en un ambiente tenebroso.







Disasters (1986-1989)

Sherman retomará su pasión por el cine y se sumerge en lo imaginario de las películas de terror. Incluso en las obras en las que no aparecen personajes, encontramos un mensaje que contiene mucha expresividad, gracias al gran trabajo detallado que Cindy hizo con las fotos de esta serie. Esta colección fue lo que hizo que Cindy decidiese decantarse por lo grotesco. 





History Portraits (1988-1990) 

Recrea algunas pinturas de periodos como el Renacimiento o el Barroco. Son fotos que materialmente pueden desmontarse, de hecho, el objetivo de la autora era que se notase que eran fotos "armadas". 





The Head Shots (2000-2002)

Para esta serie, Cindy decide recrearse y se vuelve a convertir en la modelo de sus fotografías tras apreciar todo el apoyo que sus primeras series habían recibido. Para esta ocasión, caracterizará a mujeres con vestidos elegantes y/o estilo urbano. Todas las fotos contienen referencias a trabajos anteriores por lo que se ha mencionado al inicio. 



Clowns (2003-2004)

Cindy volverá al tema de los payasos para investigar la representación de las emociones y su recepción cultural. La paleta de colores vivos que en un principio representa la alegría, contrasta con las muecas de tristeza o la expresión intimidante de cada personaje.




Society Portraits (2008)

Una serie compuesta por diversos retratos de mujeres; busca ilustrar que los entornos sociales se construyen desde la imagen. Emplea maquillaje exagerado y escenarios que denotan lujo y privilegio.



- Fotos para Instagram (2017 en adelante)

Actualmente, gracias a las nuevas tecnologías, Cindy puede seguir disfrutando vivamente de su pasión por la fotografía. Modifica sus fotos con filtros para representar la facilidad que nos otorgan las nuevas tecnologías para modificar nuestra imagen.

                       

    Hecho por Adriana Martínez y Claudia Martín.


    Segunda actividad.

    Untitled Film Stills: una historia.



      Madeline era una mujer corriente, con la vida estadounidense común en los años 70-80. Trabajaba de 9am a 5pm, la clásica y agotadora jornada de ocho horas. Eran las siete de la mañana, y ahí se encontraba Madeline, frente al espejo de su baño, después de peinarse y maquillarse, recordando todo lo que había vivido ese fin de semana. ¿En qué momento se le pasó por la cabeza que irse de fiesta el sábado era buena idea? Realmente tampoco pintaba tan mal, el problema es que la fiesta se alargó, y también duró todo el domingo. Todo tipo de sustancias, una cantidad desmesurada de gente, música alta, sudor, ajetreo... así dicho suena como una pesadilla, pero Madeline disfrutó tanto que se le olvidó que no tiene 17 años para esas cosas. Y ahí estaba Madeline, repitiéndose a sí misma que ya tiene 43 años y que tanta actividad acaba con ella y todavía más si tenía que ir con esa resaca y tanto cansancio a trabajar un lunes.

Hecho por Claudia Martín López.  

                     


 

 
 

     

 
            

      

                   


 

Comentarios